La certificación energética es una evaluación de la edificación tras la recogida de información sobre la energía consumida y las emisiones de CO2 generadas por las instalaciones térmicas y de iluminación en condiciones normales de funcionamiento. Se obtiene una etiqueta energética indicando la calificación en una escala de colores entre un rango de la A (más eficiente) hasta la G (menos eficiente).
Desde noviembre de 2007 el certificado de Eficiencia Energética es exigido para los edificios de nueva construcción y desde junio de 2013 los edificios públicos existentes (en función de su superficie) y los edificios o partes de edificios existentes que se vendan o alquilen a un nuevo arrendatario también deben tener dicha certificación.
Proceso de obtención del certificado:
- Visita del técnico certificador a la vivienda para realizar la recogida de datos y las mediciones necesarias. Es necesario analizar la envolvente del edificio (muros y huecos) y las instalaciones existentes.
- Introducción de estos datos en la herramienta de calificación habilitadas por el Ministerio de Industria.
- Sugerencias de medidas para mejorar la reducción del consumo de energía del edificio y, por lo tanto, la valoración obtenida. Estas medidas tienen carácter informativo y no obliga a hacer ninguna rehabilitación ni obras en el edificio.
- Una vez realizado el certificado de eficiencia energética, el técnico certificador entrega el original del certificado de eficiencia energética y la etiqueta de eficiencia energética al propietario de la vivienda, local o edificio.
- El propietario o promotor tramita el registro en su ámbito territorial.
Los certificados tienen validez de diez años.
El precio de la certificación energética varia en función de las características del edificio.
El procedimiento está regulado por el Real Decreto 235/2013 de 5 de abril, publicado en el Boletín Oficial del Estado Nº 89 del 13 de abril de 2013.
Mas información: Portal de certificación de eficiencia energética de edificios de la Comunidad Valenciana